«Cuando un político habla mucho de libertad, malo: se dispone a quitárnosla», reflexiona Cayo Damnatus mientras dicta sus memorias.
Cayo Damnatus, descendiente de libertos, es un viejo canalla amigo de Virgilio y de Horacio, compañero de juergas de Ovidio y de Tiberio y viajero infatigable por el orbe romano, desde Herculano a Rodas, desde Alejandría a Babilonia.
Príncipes, cónsules y prefectos se mezclan en estas memorias con taberneros sirios, danzarinas gaditanas y prostitutas de todas las procedencias, en un mundo clásico desmitificado y veraz.
Víctor Botas muestra en Rosa rosae un minucioso conocimiento de la época en que Cayo Damnatus, a partir de un modesto cargo político, llega a convertirse en uno de los más acaudalados comerciantes del Imperio, mientras aparecen en su entorno poetas, generales, sumos sacerdotes y vestales, todos ellos de carne y hueso, vivos ante el lector.
Poeta, funcionario, vividor, ejecutivo sin escrúpulos y político corrupto, Cayo Damnatus es un personaje intemporal que nos envía su cínico mensaje desde convulsiones políticas y sociales curiosamente parecidas a las nuestras.
Víctor Botas ha conseguido eludir la tentación del arcaísmo y emplea toda la frescura y la fuerza del lenguaje contemporáneo en pasajes dignos de Apuleyo o de Petronio.
Rosa rosae es la novela mítica de uno de los grandes poetas de su generación, una obra maestra por primera vez al alcance de los lectores.
«Cuando un político habla mucho de libertad, malo: se dispone a quitárnosla», reflexiona Cayo Damnatus mientras dicta sus memorias.
Cayo Damnatus, descendiente de libertos, es un viejo canalla amigo de Virgilio y de Horacio, compañero de juergas de Ovidio y de Tiberio y viajero infatigable por el orbe romano, desde Herculano a Rodas, desde Alejandría a Babilonia.
Príncipes, cónsules y prefectos se mezclan en estas memorias con taberneros sirios, danzarinas gaditanas y prostitutas de todas las procedencias, en un mundo clásico desmitificado y veraz.
Víctor Botas muestra en Rosa rosae un minucioso conocimiento de la época en que Cayo Damnatus, a partir de un modesto cargo político, llega a convertirse en uno de los más acaudalados comerciantes del Imperio, mientras aparecen en su entorno poetas, generales, sumos sacerdotes y vestales, todos ellos de carne y hueso, vivos ante el lector.
Poeta, funcionario, vividor, ejecutivo sin escrúpulos y político corrupto, Cayo Damnatus es un personaje intemporal que nos envía su cínico mensaje desde convulsiones políticas y sociales curiosamente parecidas a las nuestras.
Víctor Botas ha conseguido eludir la tentación del arcaísmo y emplea toda la frescura y la fuerza del lenguaje contemporáneo en pasajes dignos de Apuleyo o de Petronio.
Rosa rosae es la novela mítica de uno de los grandes poetas de su generación, una obra maestra por primera vez al alcance de los lectores.