Esta es una novela en dos tiempos: sobre una cancha dibujada con las líneas de la vida, un padre y su hijo entrecruzan las jugadas de sus propios sueños.
Al final hay un empate, pero adivinamos que en realidad ha ganado la esperanza.
Desde la gradería, un poeta, el fantasma de un abuelo feliz y la nostalgia aplauden la victoria, agitando pañuelos que se van por el aire para hacerle un gol definitivo a la tristeza.
Esta es una novela en dos tiempos: sobre una cancha dibujada con las líneas de la vida, un padre y su hijo entrecruzan las jugadas de sus propios sueños.
Al final hay un empate, pero adivinamos que en realidad ha ganado la esperanza.
Desde la gradería, un poeta, el fantasma de un abuelo feliz y la nostalgia aplauden la victoria, agitando pañuelos que se van por el aire para hacerle un gol definitivo a la tristeza.