MORADO BLUES es un viaje y un canto de amor por la palabra que emerge del alma misma del poeta que entre luminosidades y transparencias transita en apacible plenitud, como una noche de estrellas y luna llena, por este mundo y por los muchos otros; los qué están siempre más allá; mucho más allá y solo a través del acto poético pueden ser habitados. La poeta qué escribe estos versos, genuina y verdaderamente, llega a habitar esos territorios y es por eso que la manera de una sacerdotisa suma nos revela sus múltiples visiones y a través de esas imágenes nos incita a viajar con ella. Hagamos el viaje con la certeza de que en cada uno de nosotros está presente el deseo de retornar a ese lugar que alguna vez habitamos o soñamos con habitar, pues, si ninguna duda, todo viaje es una búsqueda y toda búsqueda trae consigo la posibilidad del encuentro y encontrarse o reencontrarse equivale a volver a ser aquello qué fuimos; esto que somos o eso que suponemos ser.
MORADO BLUES es un viaje y un canto de amor por la palabra que emerge del alma misma del poeta que entre luminosidades y transparencias transita en apacible plenitud, como una noche de estrellas y luna llena, por este mundo y por los muchos otros; los qué están siempre más allá; mucho más allá y solo a través del acto poético pueden ser habitados. La poeta qué escribe estos versos, genuina y verdaderamente, llega a habitar esos territorios y es por eso que la manera de una sacerdotisa suma nos revela sus múltiples visiones y a través de esas imágenes nos incita a viajar con ella. Hagamos el viaje con la certeza de que en cada uno de nosotros está presente el deseo de retornar a ese lugar que alguna vez habitamos o soñamos con habitar, pues, si ninguna duda, todo viaje es una búsqueda y toda búsqueda trae consigo la posibilidad del encuentro y encontrarse o reencontrarse equivale a volver a ser aquello qué fuimos; esto que somos o eso que suponemos ser.