Howard era amante de la historia. Sonya es un personaje enigmático, pero tan bien perfilado en este relato de Howard, La sombra del Biutre, que simplemente se ha de conocer el contexto para imaginar un pasado a su nivel. El pasado de Sonya ha dado pie a muchas especulaciones, algunas historias son realmente ridículas pues no están en consonancia con el personaje de Howard, sin embargo, todas son válidas pues su objetivo final radica en su potencia y capacidad para entretenernos.
Sin embargo, su origen es lo que se explica mediante este relato, La guarida de El Caníbal de María Larralde que se enmarca en el mismo contexto histórico que utilizó Howard para su personaje. Un pasado que dista muy poco de lo que el mismo Howard tuvo que imaginar al pensar en él cuando lo creó. Esto es inevitable pues la propia Sonya nos dice en muy pocas palabras, pero altamente clarificadoras quién es. El resto lo ponemos nosotros dándole la mayor dignidad posible al personaje, pues es, sinceramente, lo que pensamos que hubiera hecho Robert E. Howard.
Howard era amante de la historia. Sonya es un personaje enigmático, pero tan bien perfilado en este relato de Howard, La sombra del Biutre, que simplemente se ha de conocer el contexto para imaginar un pasado a su nivel. El pasado de Sonya ha dado pie a muchas especulaciones, algunas historias son realmente ridículas pues no están en consonancia con el personaje de Howard, sin embargo, todas son válidas pues su objetivo final radica en su potencia y capacidad para entretenernos.
Sin embargo, su origen es lo que se explica mediante este relato, La guarida de El Caníbal de María Larralde que se enmarca en el mismo contexto histórico que utilizó Howard para su personaje. Un pasado que dista muy poco de lo que el mismo Howard tuvo que imaginar al pensar en él cuando lo creó. Esto es inevitable pues la propia Sonya nos dice en muy pocas palabras, pero altamente clarificadoras quién es. El resto lo ponemos nosotros dándole la mayor dignidad posible al personaje, pues es, sinceramente, lo que pensamos que hubiera hecho Robert E. Howard.