Tierra de Silencio nos relata la funesta y trágica sequía que asoló las zonas del nordeste del Brasil en el año 1915. Rachel de Queiroz se limita a presentar de manera descarnada y contenida en su enorme patetismo, el drama de una familia que, como tantas otras, se vio forzada a emigrar huyendo de la miseria y la desolación de las tierras desérticas.
Como contrapunto, una historia de amor frustrado: la relación entre el hombre natural, perteneciente a la tierra, y la mujer intelectual que piensa que la gran diferencia que existe entre ellos sólo les puede conducir al fracaso. No hay un planteamiento revolucionario, no hay un mensaje político: Simplemente una narración realista marcada por un lenguaje sobrio, enjuto y poderosamente expresivo.
Tierra de Silencio combina con una gran maestría la historia simbólica de un amor irreconciliable y la odisea trágica y emotiva de un pueblo. Título indispensable de la narrativa brasileña contemporánea, es hoy un clásico indiscutible.
Tierra de Silencio nos relata la funesta y trágica sequía que asoló las zonas del nordeste del Brasil en el año 1915. Rachel de Queiroz se limita a presentar de manera descarnada y contenida en su enorme patetismo, el drama de una familia que, como tantas otras, se vio forzada a emigrar huyendo de la miseria y la desolación de las tierras desérticas.
Como contrapunto, una historia de amor frustrado: la relación entre el hombre natural, perteneciente a la tierra, y la mujer intelectual que piensa que la gran diferencia que existe entre ellos sólo les puede conducir al fracaso. No hay un planteamiento revolucionario, no hay un mensaje político: Simplemente una narración realista marcada por un lenguaje sobrio, enjuto y poderosamente expresivo.
Tierra de Silencio combina con una gran maestría la historia simbólica de un amor irreconciliable y la odisea trágica y emotiva de un pueblo. Título indispensable de la narrativa brasileña contemporánea, es hoy un clásico indiscutible.