¿Cómo es posible que cientos de embarcaciones, con más de dos mil personas a bordo, desaparezcan sin dejar rastro entre el Caribe y la costa norteamericana? ¿Por qué nadie sabe nada de ello, y por qué nadie se preocupa por averiguarlo? A Blair Maynard, un periodista neoyorquino, le obsesiona la idea de descubrir lo que está sucediendo.
Junto con su hijo Justin, de doce años, rastrea el asunto hasta un remoto archipiélago situado al sudeste de las Bahamas. En aquellas traicioneras aguas, innumerables islas, islotes y escollos hacen azarosa la navegacion. Las investigaciones de Blair no conducen a nada anormal, hasta que un simple accidente da comienzo a una serie de insólitas y dramáticas situaciones que llevarán al protagonista a la solución del misterio.
El tema de Isla orbita en torno a un problema estrictamente real, documentado por el servicio de guardacostas de los Estados Unidos. Benchley, que había empezado a investigar por mera curiosidad, terminó por hallar los elementos para una novela en la que realidad y fantasía se funden imperceptiblemente y mantienen al lector en la tensión de un apasionante suspense.
¿Cómo es posible que cientos de embarcaciones, con más de dos mil personas a bordo, desaparezcan sin dejar rastro entre el Caribe y la costa norteamericana? ¿Por qué nadie sabe nada de ello, y por qué nadie se preocupa por averiguarlo? A Blair Maynard, un periodista neoyorquino, le obsesiona la idea de descubrir lo que está sucediendo.
Junto con su hijo Justin, de doce años, rastrea el asunto hasta un remoto archipiélago situado al sudeste de las Bahamas. En aquellas traicioneras aguas, innumerables islas, islotes y escollos hacen azarosa la navegacion. Las investigaciones de Blair no conducen a nada anormal, hasta que un simple accidente da comienzo a una serie de insólitas y dramáticas situaciones que llevarán al protagonista a la solución del misterio.
El tema de Isla orbita en torno a un problema estrictamente real, documentado por el servicio de guardacostas de los Estados Unidos. Benchley, que había empezado a investigar por mera curiosidad, terminó por hallar los elementos para una novela en la que realidad y fantasía se funden imperceptiblemente y mantienen al lector en la tensión de un apasionante suspense.