Quien recorra la bibliografía provista por este libro advertirá que su tema no ha merecido, en nuestro idioma, mayor consideración por parte de la crítica. Son incluso escasas las traducciones castellanas de los estudios consagrados, sobre todo en inglés y francés, a la vida y la obra de los hermanos Brontë. Se diría que el tema, prominente en Europa, reconocido en los Estados Unidos, no supo despertar en Sudamérica el mismo interés. El hecho no deja de ser curioso si se recuerda que fue el romanticismo la corriente literaria que en el siglo XIX contribuyó a plasmar nuestro perfil como nación.
Lejos de la intrincada selva de especulaciones que podría suscitar esta tenaz indiferencia, Lydia Pinkus resolvió apartarse de ella y consagró a los célebres y trágicos hermanos ingleses un estudio doblemente meritorio. Primeramente, porque está entre los de mayor envergadura conceptual que se hayan publicado en Buenos Aires. En segundo lugar, porque cotejado con otros de gran relieve, hay que decir que no les va a la zaga en la originalidad con que aborda este enigmático asunto.
Obra reveladora de un temperamento esencialmente narrativo, Los Hermanos Brontë responde no obstante a todas las imposiciones de una exégesis rigurosa. Logra aunar así, en una expresión tersa e iluminadora, ese doble interés por la investigación y el relato que es tan característico de Lydia Pinkus. Al otorgarle el Primer Premio de Ensayo correspondiente al año 1997, el Fondo Nacional de las Artes ha sabido reconocer un libro infrecuente, sólido y cautivante. - Santiago Kovadloff
Quien recorra la bibliografía provista por este libro advertirá que su tema no ha merecido, en nuestro idioma, mayor consideración por parte de la crítica. Son incluso escasas las traducciones castellanas de los estudios consagrados, sobre todo en inglés y francés, a la vida y la obra de los hermanos Brontë. Se diría que el tema, prominente en Europa, reconocido en los Estados Unidos, no supo despertar en Sudamérica el mismo interés. El hecho no deja de ser curioso si se recuerda que fue el romanticismo la corriente literaria que en el siglo XIX contribuyó a plasmar nuestro perfil como nación.
Lejos de la intrincada selva de especulaciones que podría suscitar esta tenaz indiferencia, Lydia Pinkus resolvió apartarse de ella y consagró a los célebres y trágicos hermanos ingleses un estudio doblemente meritorio. Primeramente, porque está entre los de mayor envergadura conceptual que se hayan publicado en Buenos Aires. En segundo lugar, porque cotejado con otros de gran relieve, hay que decir que no les va a la zaga en la originalidad con que aborda este enigmático asunto.
Obra reveladora de un temperamento esencialmente narrativo, Los Hermanos Brontë responde no obstante a todas las imposiciones de una exégesis rigurosa. Logra aunar así, en una expresión tersa e iluminadora, ese doble interés por la investigación y el relato que es tan característico de Lydia Pinkus. Al otorgarle el Primer Premio de Ensayo correspondiente al año 1997, el Fondo Nacional de las Artes ha sabido reconocer un libro infrecuente, sólido y cautivante. - Santiago Kovadloff