Jaime Siles es catedrático emérito de Filología Latina de la Universi¬dad de Valencia. Sus libros han merecido el Premio Ocnos , el Premio de la Crí¬tica , el Premio Loewe , el Pre¬mio Generación del 27 y el Premio Jaime Gil de Biedma . También ha recibido el Premio Teresa de Ávila , el Premio de las Letras Valencianas y el Premio Andrés Bello , estos tres por el conjunto de su obra. Este nuevo libro de Jaime Siles, Doble fon¬do, ahonda en la línea de su pensamiento y profundiza en su sistema de dicción, a los que añade e incorpora un abanico de núcleos temáticos, todos ellos interrelacionados entre sí, en torno a los que la poética existencial de su autor traza y teje una lúcida y rigurosa reflexión sobre el Ser del Tiempo, del Yo y del Poema, la na¬turaleza del signo, la reverberación de la memoria y los espectros de la identidad. Poesía, pues, de conocimiento, en la que los recursos del lenguaje son tensados hasta el máximo de sus posibilidades y en la que los límites entre poesía y filosofía, sin confundirse, se llegan a identificar.
Jaime Siles es catedrático emérito de Filología Latina de la Universi¬dad de Valencia. Sus libros han merecido el Premio Ocnos , el Premio de la Crí¬tica , el Premio Loewe , el Pre¬mio Generación del 27 y el Premio Jaime Gil de Biedma . También ha recibido el Premio Teresa de Ávila , el Premio de las Letras Valencianas y el Premio Andrés Bello , estos tres por el conjunto de su obra. Este nuevo libro de Jaime Siles, Doble fon¬do, ahonda en la línea de su pensamiento y profundiza en su sistema de dicción, a los que añade e incorpora un abanico de núcleos temáticos, todos ellos interrelacionados entre sí, en torno a los que la poética existencial de su autor traza y teje una lúcida y rigurosa reflexión sobre el Ser del Tiempo, del Yo y del Poema, la na¬turaleza del signo, la reverberación de la memoria y los espectros de la identidad. Poesía, pues, de conocimiento, en la que los recursos del lenguaje son tensados hasta el máximo de sus posibilidades y en la que los límites entre poesía y filosofía, sin confundirse, se llegan a identificar.